The instigators

A veces todo lo que puede salir mal, sale mal, y se hacen pastiches sin alma, sin sorpresa, sin arte.

2 Butacas

Los instigadores es una película nueva bajo el influjo de Apple, que hay que decir, produce cosas buenas, pero acá algo pasó.

Y no es por falta de nombres, que supongo también a veces lo hacen solo por dinero, como cualquier trabajo.

El guión es muy básico: el marine retirado Rory (Matt Damon deslucido y sin ganas ni expresión, con algunas intenciones de algo de Bourne que no funcionan ni como evocación) y el alcohólico Cobby (Cassey Affleck, coautor del guión) son dos tipos duros que el jefe del crimen local de Boston, el Sr. Besegia (Michael Stuhlbarg, siempre está bien verlo) y Richie Dechico (Alfred Molina también desaprovechado) reclutan medio porque no tienen a otros, para robar fuerte. 

El alcalde actual de la ciudad, (Ron Perlman merece todos los homenajes), se enfrenta un contrincante asiático, es Boston, nunca va a ganar dicen en su campaña. Los dos jefes creen que Micceli va a ganar de manera aplastante, como siempre hace. 

En el bunker en el cual se esperan los resultados, que seguirá con una festichola a lo grande, se entra mediante el pago en efectivo de un ticket (soborno claro) lo que dejará seguramente mucha plata cash. 

El robo, que era fácil en los papeles, se complica porque Miccelli pierde, lo que deja a Rory y Cobby huyendo del atraco sin ningún botín.

Habrá entonces persecuciones, malos entendidos, y una cacería para encontrarlos ya que, entre lo poco que se llevaron estaba una pulsera del alcalde que tiene la combinación de una enorme caja fuerte en la que está todo el dinero recaudado de manera corrupta.

El problema está en el guión. Es muy flojo, está lleno de chistes que quizá la personalidad desganada de Affleck (el Affleck que sabe actuar) no ayudan a capitalizar, y con un Damon apagado, todo es confuso en lugar de divertido.

Es difícil hasta resumirla en una crítica o reseña, de lo anodina.

Está llena de nombres, está llena de buenas intenciones, pero aburre mucho y no deja lugar común por visitar.