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Hace unos años visité Belfast en un viaje a Irlanda. Fue una excursión corta, uno llega y todo cambia, desde la divisa, las banderas, el idioma. 

9 Butacas

Y sin querer uno se encuentra con paredes que hablan, que dicen cosas, y barrios que todavía, esto fue hace un par de años, tienen rastros, recuerdos, pequeños focos de rebeldía.

Los años 70 fueron tumultuosos en varias regiones del mundo, acá en Latinoamérica con los movimientos de guerrilla, pero también en España con la ETA y en Irlanda, con esa lucha histórica y el IRA.

Los suceso conocidos como The troubles van de fines de los años 60 hasta los acuerdos de viernes santo de 1998. En ese período hubo atentados, muertes y una población en peligro constante.

Esta serie tiene ese telón de fondo, el de la lucha antigua entre republicanos católicos que buscaban la reunificación de Irlanda (anexar ese pedazo de territorio que conocemos con "Irlanda del norte" gobernado por Inglaterra y los partidarios de seguir siendo parte del Reino Unido, en su mayoría protestantes.

Una guerra entre el ejército inglés y grupos guerrilleros o paramilitares.

Cuestiones sociales, políticas y religiosas como parte de un conflicto antiguo y difícil.

La historia está contada a partir de la vida de dos hermanas, Dolours y Marcia Price, hijas de un viejo militante, que desde niñas saben lo que hace su padre, sus periodos escondido, y sus ideales.

Apenas pueden se suman a la causa, una causa de hombres, pero que ellas dos se las ingeniarán para salir de los trabajos menores y de los que solían hacer las mujeres, que era básicamente de apoyo a los que combatían, para pasar a la acción ellas, planear y ejecutar ataques, el más famoso una serie de bombas simultáneas en el centro de Londres.

Fueron presas, se convirtieron en leyendas y vivieron una vida de lucha, aun retiradas.

La serie es excelente, nos va contando historias paralelas, nos lleva y trae en el tiempo, con lo cual vemos a los protagonistas a lo largo de sus vidas, cuando pasan de las armas a la política, con los desacuerdos internos que eso conlleva, los tratados que firman, el decisivo protagonismo de Gerry Adams, al principio líder de una facción armada y luego con los años devenido en parlamentario pacifista, de alguna manera enfrentado con los que compartieron militancia en los años duros.

Todo en la serie está muy bien cuidado y contado, aunque no se molesta en decir el punto de vista narrativo y la toma de partido ante cada suceso.

La protagonista, Dolours, fue esposa del actor Stephen Rea, un dato nada menor en este entramado, ya que le da una dimensión impensada al peso del personaje.

La serie advierte al final de cada episodio que Adams ha negado y sigue negando su participación en la violencia.

Si no fuera un relato basado en hechos reales sería una buena ficción, entretenida y muy dinámica, pero no podemos pasar por alto que todo lo que cuentan, al menos desde los hechos, sucedió.

Es también una historia que no denuncia, que no se arrepiente, que no intenta endulzar nada y toma partido, esto puede dejar a mucha gente afuera del relato.

Entrecruza historias (todas reales) de una manera magistral, sin ir más lejos la historia de una viuda que es "arrestada" al comienzo de la serie, es llevada por una brigada del IRA que la encontraba colaboracionista de los ingleses, cuya historia vuelve y vuelve en el relato hasta los episodios del final.

Esto en los años posteriores crece y aparece un movimiento de "desaparecidos" por la propia guerrilla armada.

El Proyecto Belfast, una serie de entrevistas en cassettes con los protagonistas, con el auspicio y fondeo de una universidad de Estados Unidos, que tenía como condición que esos audios no pueden darse a conocer sino hasta que el protagonista entrevistado muera, es la base narrativa de lo que vamos a ir viendo, esos textos en los que se dan detalles y ponen toda la historia patas para arriba.

Las hermanas Price, Gerry Adams (interpretado por Josh Finan cuando era joven, Michael Colgan en años posteriores, ambos silenciosamente aterradores) y Brendan Hughes o Dark (Anthony Boyle, continuando su reciente racha de actuaciones impecables el que ponderamos hace poco fue el Booth de Manhunt sobre el asesinato de Lincoln, luego Tom Vaughan-Lawlor en su desilusionada mediana edad), lideres de la infame y brutal compañía D de la organización en los años 70.

En esos cuatro nombres se centra el desarrollo principal de la historia.

Es una serie atrapante, que hay que ver con esa advertencia de que toma partido, pero muy interesante en la manera en la que está contada.