Mare of Easttown

Mare of Easttown

Un retrato lleno de matices y profundidad, de una mujer que no llega a los 50 años, pero que ha vivido mucho y triste, que incluye una historia policial despiadada, de pueblo chico.


8 Butacas



Es un placer verla actuar a Kate Winslet sin un solo filtro, con sus arrugas y redondeces, con sus cansancios en el cuerpo y su mochila de mil temas a cuestas, simplemente es un placer.

Porque entramos a esta serie pensando que es una serie policial, es cierto que el primer capítulo termina con un crimen atroz, una chica aparece desnuda en un bosque, pero esa es una excusa para contarnos una historia de desencantos, de pueblo chico, de tragedias inocultables.

Y todo se va a desarrollar a partir de la enorme actuación que ofrece Winslet, la Mare del título.

Ella es una detective que vive torturada por su comunidad porque todavía no pudo cerrar la desaparición de una joven, hija de una amiga, que falta desde hace meses, y por otro lado este otro crímen que, por la edad de las víctimas, puede desembocar en algo serial.

Pero todo se va desarrollando sobre el impacto emocional que estos casos producen en Mare. Su vida suburbana, el suicidio de su hijo mayor, a quien ella descubre ahorcado en el altillo (era adicto), la lucha por la tenencia de su nieto, para que no quede al cuidado de su madre adicta, el amor, la relación con otra hija, la madre, su ex marido, todo es un problema para esta mujer que todo lo sostiene y todo lo soporta.

Sobre esa partitura, con buena dirección y buenas actuaciones, se va desarrollando la historia policial, que en realidad se parece a otras, que no viene a aportar nada muy novedoso, tanto que deben recurrir a un recurso muy interesante en el último capítulo, cuando se supone que tienen todo resuelto falta casi una hora para terminar, así que introducen un elemento fortuito, un azar, para que Mare descubra que no estaba todo resuelto, y que la verdad es mucho más compleja y dura de lo que pensábamos.

Otra vez, la historia policial es una excusa para ver esa actuación magnífica de una actriz que en su madurez, logra una gran composición de matices y notas complejas.

Todo es ella en el relato, todo es esa mujer que no puede descansar, que todo la golpea duro, que está disponible para todo el pueblo que no duda en atacarla cuando las cosas no salen como todo el mundo quiere.

Ella está del lado de la ley, sabe lo que está bien y lo que está mal, y sabe cumplir con su deber aunque eso lastime a los suyos.

No es una serie común, hay que estar preparados para verla, porque el sufrimiento de la protagonista, es demasiado fuerte como para dejarnos indiferentes.

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