Three families

Three families

En Irlanda del Norte (Inglaterra) el aborto estuvo penado por la ley hasta el año 2019. Esta miniserie de dos capítulos con claro mensaje a favor, aborda tres historias reales.


6 Butacas

Tres historias bien diferentes pero de alguna manera vinculadas por la restricción, el y la discusión sobre los derechos. Un drama con todos los ingredientes.

Es bueno el abordaje, porque si bien tiene una intención clara a favor de la interrupción de los embarazos, pone arriba de la mesa casos particulares, que son aquellos que tensan el debate, y desarrollan esas historias de vida alrededor de esas restricciones, de manera de propiciar un debate que es muy vigente en la sociedad.

No se mete con cuestiones religiosas de manera directa, pero si intervienen las reacciones sociales, la verguenza ante los amigos, lo que se oculta y lo que se dice, y en algún caso (la historia de la madre que es procesada porque compró pastillas del día después para su hija adolescente) una discusión judicial que hasta hace poco estuvo vigente en ese País.

Los casos además de estar bien abordados, se cuidan de poner un equilibrio en cuanto a clases sociales, acceso a la información, educación, y miradas familiares, lo que hace que las historias, además de estar bien actuadas, sean creíbles desde el punto de vista de lo que pasan esas mujeres que por razones bien distintas hubieran preferido interrumpir sus embarazos.

No baja línea, aunque lo hace, de manera explícita, las historias tienen un desarrollo tal que nos hacen pensar que es la mejor opción (en un caso por ejemplo, obligan a una madre a terminar un embarazo con un bebé que morirá irremediablemente al momento de nacer por una enfermedad detectada, entonces vamos a ver los últimos meses de esa mujer con ese cuadro).

Hay también un aspecto social interesante, y es la campaña que está como telón de fondo de la historia. Hay una campaña que moviliza a la gente de manera constante y militante, frente a una clínica que se dedica a ver los casos por ejemplo.

El telón de fondo de esa campaña está muy bien reflejado en la serie y es estrictamente cierto, mientras el Reino Unido despenalizó el aborto para esos casos abordados en las historias, en 1967, la resistencia de los habitantes de Irlanda del Norte hizo que recién en 2019 y por la fuerza, el Reino Unido impusiera la igualdad ante la ley en ese territorio.

Está bien actudada, es equilibrada en el abordaje porque no exagera las posturas, pero es claramente una mirada pro aborto, una manera inteligente de abordar y tomar partido por la discusión, a partir de una ficción bien hecha.

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