Hallow road

Una de esas películas "de auto", quiero decir, que la escenografía protagónica es el interior de esa cabina durante un viaje de madrugada. 


5 Butacas



Este tipo de películas, cuando deliberadamente se instala la acción allí, descansa en la calidad de los intérpretes. Vimos hace poco una de taxi con Sean Penn y Dakota Johnson y hace unos años una con Tom Hardy en la misma situación.

Un teléfono es la conexión con el hecho al que van a encontrarse y en medio las tensiones de no poder estar ahí.

La película (que no tiene fecha de estreno en Argentina y seguro irá a alguna plataforma) arranca lenta, con unos planos de una casa silenciosa en medio de la noche, planos que son de película de terror más que de intimidad, pero como no sabemos con qué nos vamos a encontrar nos dejamos llevar.

Allí viven Rosamund Pike y su esposo Matthew Rhys, ambos buenos intérpretes a quienes de antemano no imaginamos juntos.

Ella es una paramédica de emergencias, los dos están despiertos, es tarde, están por separado en esa casa cada uno en lo suyo.

Vemos por los portarretratos, por las fotos, que falta alguien, la hija adolescente de ambos, y por la incomodidad de esas primeras escenas, vamos a descubrir que no está en la casa, que algo pasa que no sabemos qué es.

De pronto una llamada, a las discusiones casuales de ambos, que parecería que no están bien entre ellos, llega una llamada que los inquieta, la hija los llama sollozando, algo le pasó. Se llevó el auto de su padre y algo le pasó en la carretera.

Salen los dos como están en el auto de ella, se echan al camino y lo que viene en la película es de gran vuelo actoral, vamos a ir imaginando qué le pasó a su hija, adónde está, por qué se escapó y los problemas que tiene con solo esa voz en el teléfono.

Pero también hay decisiones que tendrán que ir tomando, ruidos, explicaciones que derivarán en más tensión entre ellos, reproches, hasta que el espanto por lo que está pasando y no pueden ni ver ni ayudar ni controlar, los hace tirar parejo.

La película es lenta, obviamente, pero plantea una tensión tan bien llevada que se hace muy adictiva.

El tema con estos relatos, pasa muy seguido, es que hay que darles un final y ese final no siempre está a la altura de lo que vimos.

Quiero decir, es mejor el desarrollo que la trama.

A medida que todo esto se desarrolla, aprendemos detalles de su vida familiar, la crisis que llevó a la discusión, el secreto que Mads le oculta a Frank y otras causas de fricción.

También escuchamos cómo Frank (el padre) planea proteger a Alice en la investigación policial que probablemente seguirá, lo que nos lleva a ese dilema: ¿Qué haríamos nosotros en semejante situación?

Hay desesperación, hay thriller, pero también hay final abierto, demasiado abierto, que no nos deja conformes.

Vale más la pena esa escena del auto que todo el resto.

Es corta, eso está muy bien.

Comentarios

Entradas populares