La nueva vida de Toby (Fleishman is in trouble)

La nueva vida de Toby (Fleishman is in trouble)

New York, adultos jóvenes que pelen con su crisis de mediana edad contando una historia de amores, desamores, amistad y reflexión sobre los sueños y la realidad. Woody Allen presente mucho más de lo que seguro algunos de los protagonistas quisieran.


6 Butacas



Porque la serie de Star+ que viene en 8 capítulos de duración irregular, si bien está escrita, dirigida y protagonizada por una generación mucho más joven que el enorme Woody, tiene de alguna manera su perfume.

Son personajes que piensan todo, que se preguntan todo, a quienes les suceden cosas graciosas o terribles, que encaran siempre con un destello de ironía o sarcasmo, y que se deprimen a la noche a pensar en todo lo mal del universo.

Jessie Eisemberg es Toby Fleishman, un doctor especialista en hígado que aca de divorciarse y es el centro de este relato.

Su esposa Claire Danes, no solo lo deja, sino que además desaparece un fin de semana dejándole los chicos durante la noche.

La tercera protagonista de esta historia, y narradora en off todo el tiempo, es Lizzy Caplan, que es amiga de Toby desde la escuela, es judía como él, y han hecho todo juntos, desde el colegio hasta viajar a Israel.

La historia tiene un buen esquema de narrativa, es decir, vamos a ir armándola de a poco, con los relatos de los protagonistas y algunos flashbacks muy precisos.

Al haber una narradora en off, nos podemos enterar de lo que pasa por la cabeza principalmente de Toby, ya que nos irá contando qué es lo que le pasa ante cada situación con la que se cruza.

Pero todos están en los 40 y preguntándose todas las cosas imaginables, el consumismo, la vida corporativa, la profesión, el amor, la amistad, todo está en discusión y en carne viva.

El relato se las arregla para que cuando se pone demasiado dramático entre el costado del humor judío, ese que los hace reírse de ellos mismos ante las desgracias y contradicciones.

Lo bueno es que no solo vamos a tener los hechos contados por Toby, en algún momento, dedicándole un capítulo entero a cada historia, los otros dos protagonistas nos contarán cómo llegaron hasta ese momento en el que la historia comienza, es decir, veremos los mismos hechos desde las tres perspectivas, lo que nos ayudará mucho a entender la historia.

La comedia viene, entre otros recursos, de la mano de lo que descubre Toby en términos de qué hacer con su nueva soledad, el uso de las aplicaciones para citas, el sexo y lo complicado que se hace en ese contexto la vida nueva con sus hijos.

En definitiva, una comedia con mucho de reflexión, cuyo drama no llega nunca a hacernos conmover, pero que reflexiona (tal vez demasiado) sobre todo eso que creemos que tenemos que lograr en alguna etapa de la vida, y cuando lo logramos no sabemos, no podemos siquiera vislumbrar qué es lo que sigue.

Quizá tiene demasiado texto, y demasiado rulo en esos textos que son muy esmerados, ese dato que tan bien maneja el genio de Manhattan pero que hay que ser él para saber dosificarlo.

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