The secret
The secret
Basada en un hecho real, cuando el fanatismo religioso se transforma en la locura que todo lo justifica.
6 Butacas
Con la tradicional y bienvenida factura inglesa para contar historias, The secret se presenta como una historia real, que transcurrió en una ciudad costera del norte de Irlanda y que se desarrolló durante 20 años.
James Nesbitt, a quién elogiamos en la primera temporada de The missing, es Colin, un cristiano bautista ferviente, canta y toca la guitarra en el servicio, lleva una vida ejemplar con su mujer y sus 3 hijos. Es dentista, es bueno, y todos acuden a él como un miembro relevante de su comunidad.
Genevieve O'Reilly (a quién descubrimos en Tin Star, como esposa de Tim Roth) es Hazel, una rubia pálida de belleza etérea, casada con un policía, también miembros de esa iglesia bautista, madre devota y maestra de escuela.
Entre ellos, solo miradas.
Alguna insinuación leve, alguna broma, pero sus convicciones religiosas están por encima de cualquier deseo.
Hasta que se dejan llevar. No pueden frenar el sentimiento y el deseo y comienzan una aventura.
En una ciudad chica, todos están a la vista, así que el pastor de la iglesia, que ejerce sobre ellos una autoridad moral superior, los descubre y blanquea con sus parejas la aventura.
Parece que todo se derrumba, pero, cristianos devotos, se perdonarán mutuamente y seguirán con sus vidas. Aunque la pasión no se haya extinguido.
Vuelven a verse, más lejos, más de incógnito. Pero empiezan a pensar en que hay algo que se interpone a esa felicidad, a esa ilusión de una familia ampliada entre ellos y los hijos de ambos. Sus respectivas parejas.
Así planearán deshacerse de ellos, de manera inteligente, casi perfecta, para que todos crean que es un suicidio concertado.
A partir de ese momento, todo lo que parecía ser de una manera se transforma en otra, la armonía entre ellos se convierte en tensión, aunque nunca peligra el secreto tan complejo que los une, los dos se van alejando y la pasión desaparece.
Rearman sus vidas lejos el uno del otro, tendrán más hijos y parejas que los quieran, volverán a la iglesia (en otra ciudad) y sus vidas se irán desarrollando hasta que una serie de eventos los hagan volver a cruzarse.
Es un relato inteligente y sobrio, sin apelar a golpes bajos ni giros efectistas, que cuenta con detalle unos 20 años en las vidas de dos personas que han tenido atracción entre ellos y han cometido un crimen impune.
Esa tensión y las actuaciones son quizá lo mejor de esta miniserie de 4 entregas rodada en Irlanda.
Basada en un hecho real, cuando el fanatismo religioso se transforma en la locura que todo lo justifica.
6 Butacas
Con la tradicional y bienvenida factura inglesa para contar historias, The secret se presenta como una historia real, que transcurrió en una ciudad costera del norte de Irlanda y que se desarrolló durante 20 años.
James Nesbitt, a quién elogiamos en la primera temporada de The missing, es Colin, un cristiano bautista ferviente, canta y toca la guitarra en el servicio, lleva una vida ejemplar con su mujer y sus 3 hijos. Es dentista, es bueno, y todos acuden a él como un miembro relevante de su comunidad.
Genevieve O'Reilly (a quién descubrimos en Tin Star, como esposa de Tim Roth) es Hazel, una rubia pálida de belleza etérea, casada con un policía, también miembros de esa iglesia bautista, madre devota y maestra de escuela.
Entre ellos, solo miradas.
Alguna insinuación leve, alguna broma, pero sus convicciones religiosas están por encima de cualquier deseo.
Hasta que se dejan llevar. No pueden frenar el sentimiento y el deseo y comienzan una aventura.
En una ciudad chica, todos están a la vista, así que el pastor de la iglesia, que ejerce sobre ellos una autoridad moral superior, los descubre y blanquea con sus parejas la aventura.
Parece que todo se derrumba, pero, cristianos devotos, se perdonarán mutuamente y seguirán con sus vidas. Aunque la pasión no se haya extinguido.
Vuelven a verse, más lejos, más de incógnito. Pero empiezan a pensar en que hay algo que se interpone a esa felicidad, a esa ilusión de una familia ampliada entre ellos y los hijos de ambos. Sus respectivas parejas.
Así planearán deshacerse de ellos, de manera inteligente, casi perfecta, para que todos crean que es un suicidio concertado.
A partir de ese momento, todo lo que parecía ser de una manera se transforma en otra, la armonía entre ellos se convierte en tensión, aunque nunca peligra el secreto tan complejo que los une, los dos se van alejando y la pasión desaparece.
Rearman sus vidas lejos el uno del otro, tendrán más hijos y parejas que los quieran, volverán a la iglesia (en otra ciudad) y sus vidas se irán desarrollando hasta que una serie de eventos los hagan volver a cruzarse.
Es un relato inteligente y sobrio, sin apelar a golpes bajos ni giros efectistas, que cuenta con detalle unos 20 años en las vidas de dos personas que han tenido atracción entre ellos y han cometido un crimen impune.
Esa tensión y las actuaciones son quizá lo mejor de esta miniserie de 4 entregas rodada en Irlanda.
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