La Unidad

La Unidad

Hace rato lo sabemos, la industria española de contenidos es cada día más poderosa y se anima a más. La Unidad es, por lejos, una demostración de ese poderío por encima de todo.

7 Butacas

Una palabra puede resumir la serie, espectacularidad, es lo que se derrama de la pantalla en esta nueva serie de Movistar+ que al intentar retratar a una unidad especial de la policía española encargada de perseguir y desarmar terroristas después de Atocha, tiene que tener escenarios diversos, despliegue, y sobre todo, realismo que se consigue con más presupuesto.

Pero se puede tener mucho, pero comunicar poco, no entusiasmar, no enamorar, no atrapar. Y en este caso, lo logran con bastante holgura.

No es que nos vayamos a enamorar de la historia, pero está muy bien contada, tiene dinamismo, tiene mucho despliegue, está creíble y bien actuada, y entonces fluye.

A diferencia de más de un intento sobre la misma temática encarada por Hollywood por ejemplo, acá no es necesario recurrir a saberes previos o cosas no dichas, está todo a la vista, los personajes se desarrollan al compás de la trama y no nos requiere demasiado esfuerzo ver por donde están los malos y qué es lo que se proponen.

No se trata de una historia de personajes, es decir, no entramos a la trama a través de ellos, es más, la caracterización, la manera de introducirlos es más bien la contraria, no vemos héroes en ellos, vemos personas que se ganan la vida con un trabajo distinto, y el foco está siempre puesto en el desarrollo de la trama.

La falta de espectacularidad de los personajes es un dato muy relevante, tanto que por pasajes, por lo bien que están realizadas las escenas, parecería que estamos frente a un documental.

Un hallazgo inesperado, el protagónico de Michell Noher, que se pone a sus espaldas todo el peso de un personaje muy a su medida pero muy bien llevado. 

Son 6 episodios muy potentes, muy completos, complejos pero muy llevaderos y sobre todo, no dan tregua, todo el tiempo pasan cosas, no hay baches y no hay contrasentidos.

En definitiva, gran entretenimiento.