Papillon

Papillon

No era necesario. Mancillar el recuerdo de una gran película con una remake tan pero tan mala que cuesta terminar de ver.




2 Butacas




Ya no es 1973, ni Dustin Hoffman ni Steve McQueen. Mucho menos Dalton Trumbo en la máquina de escribir.

No pudieron con la tentación de hacer una nueva versión con un equipo más o menos parecido, e intentar revivir esos viejos buenos momentos que generó está película de escape, de cárcel y de amistad.

Uno parecido a McQueen, Charlie Hunnam, que demostró arte para la acción en la excelente Sos of anarchy, pero que es de madera. Un paleta corta y repetitiva de movimientos de cabeza y mohines insoportables. Si ya lo vieron una vez, lo vieron para siempre, y no es para andar repitiendo. No tiene gracia, no transmite nada, solo es bonito.

El otro, un tanto freak, como Dustin, y en los días previos a su consagración en el papel de Freddy Mercury en Rapsodia Bohemia, Remi Malek, que si fuera por esta composición no lo hubiesen elegido para nada!

En fin, la trama es la misma, las actuaciones son pésimas. Ni siquiera se tomaron el trabajo de, con las licencias de caso, darla una vuelta de tuerca interpretativa, un giro, algo que la haga más actual.

Nada de nada.

La película entonces es gomosa, calurosa, larga, insoportable.

No vale la pena ni seguir.

Es un pésimo intento por traer a estos años una película que nos hizo felices.

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